DISECCIÓN DEL ENCÉFALO DE UN CORDERO

1. INTRODUCCIÓN TEÓRICA

El encéfalo, perteneciente al Sistema Nervioso Central, del que parte la médula espinal, es propio de todos los animales bilaterales. Cabe recordar que, ya que pertenece a este sistema, está formado por neuronas, transmisoras de los impulsos nerviosos y que presentan interconexiones, y células gliales, que les sirven de soporte, entre ellas las células de Schwann, ricas en mielina. . .

En vertebrados el encéfalo está situado en la cabeza y protegido por el cráneo. Para que el cráneo no toque directamente el encéfalo y pueda producir alguna lesión, existen 3 capas de amortiguación llamadas meninges: piamadre, aracnoides y duramadre, de interior a exterior. Entre las dos últimas se encuentra el líquido cefalorraquídeo, que otorga mayor protección.

El encéfalo en vertebrados está conformado por las siguientes partes:

- El cerebro

Consta de diversas zonas.

La corteza cerebral, parte más externa, formada por sustancia gris (los somas de las neuronas), presenta circunvoluciones, repliegues para un mayor aprovechamiento de la superficie. A esta área llega la información relacionada con los procesos mentales más complejos, recogida en las conexiones entre neuronas. Es responsable del pensamiento, de funciones del lenguaje y del movimiento, entre otros. La corteza cerebral se divide en varios lóbulos con funciones específicas.

Asimismo, la corteza cerebral se divide en dos hemisferios. Según investigaciones, el izquierdo se vincula al pensamiento lógico y el derecho al artístico. Los hemisferios se comunican entre ellos mediante el cuerpo calloso, por donde también llegan a la corteza cerebral los impulsos eléctricos (a través de los axones de las neuronas cuyos somas se encuentran en la corteza) y la información desde el tronco encefálico, o haciendo el sentido inverso. El cuerpo calloso forma parte del sistema límbico, una gran región del cerebro que regula emociones, instintos y sexualidad, entre otros.

El tálamo es la región del sistema límbico que regula los mensajes nerviosos sensoriales de la corteza cerebral.

El hipotálamo es otra región del sistema límbico, que se encarga de la homeostasis (la regulación de la acidez, temperatura, salinidad, presión sanguínea, etc. en el organismo).

La hipófisis es una glándula anexa al cerebro, cuya función es liberar hormonas que se ejecutan directamente sobre unas células, tejido u órgano (como la hormona del crecimiento) o que actúan sobre otra glándula (como la prolactina, que provoca la fabricación de leche en las glándulas mamarias).

La glándula pineal segrega melatonina, que afecta a los patrones del sueño.

- El cerebelo

El cerebelo es un órgano que integra la información de las vías sensitivas con la de las vías motoras, es decir, controla los impulsos que la corteza cerebral envía al aparato locomotor, coordinando movimientos. Es responsable del mantenimiento del equilibrio. Al igual que el cerebro, la corteza está formada por sustancia gris y el interior por sustancia blanca.

- Tronco encefálico

Enlaza el encéfalo con la médula espinal (los impulsos nerviosos pasan por él) y está formado por el mesencéfalo, la protuberancia anular y el bulbo raquídeo. Controla funciones involuntarias y esenciales como el latido cardíaco, el ritmo respiratorio, el vómito o el estado de sueño, entre otras.

2. MATERIAL NECESARIO

-          Encéfalo de cordero

-          Papel de filtro

-          Bisturí

-          Guantes de látex

-          Bata de laboratorio

-          Rotulador permanente

3. HIPÓTESIS INICIAL

El encéfalo de cordero, del tamaño de la mitad de un puño en total y de un color rosado en lo que respecta a cerebro y cerebelo, presenta las características mencionadas en la introducción teórica. No obstante, es posible que dada la inexperiencia para trabajar, las regiones internas del cerebro (cuerpo calloso, hipotálamo, etc.) sean difíciles de identificar. El cerebro presenta circunvoluciones un poco difusas, al igual que el cerebelo. Las meninges han sido retiradas en su totalidad, al igual que los nervios que no llegan a la médula espinal. El bulbo raquídeo es fácilmente identificable entre las partes del tronco encefálico.

4. OBJETIVOS DE LA PRÁCTICA

Aprender sobre los nombres y funciones de las regiones encefálicas, que abarcan órganos, zonas de estos, tejidos y glándulas.

Observar las partes del encéfalo y las subpartes de la zona cerebral.

Conocer de qué está formado el SNC en cuanto a células y sus agrupaciones.

Familiarizarse con la higiene debida y el trabajo en el laboratorio.

5. MÉTODO DE EXPERIMENTACIÓN

1.      Se prepara la zona de trabajo, lavando el encéfalo para eliminar los restos de sangre.

2.      Se coloca el encéfalo sobre el papel de filtro, donde se anotan sus partes.

3.      Se separan del cerebro, mediante el bisturí, el cerebelo y parte del tronco encefálico.

4.      Se levanta el cerebro y desde abajo se observan los nervios ópticos que llegan a él, así como el mesencéfalo, parte del tronco encefálico.

5.      Se separa con el bisturí el mesencéfalo del cerebro.

6.      Mediante el bisturí, se secciona el cerebro por la cesura interhemisférica, dejando ambos hemisferios divididos.

7.      Se procede a observar las regiones internas del cerebro.

6. OBTENCIÓN DE RESULTADOS

Estado inicial del encéfalo de cordero

Encéfalo de cordero con partes anotadas en el papel de filtro.

Cerebro dividido en ambos hemisferios con diversas partes señaladas.

Glándula pineal señalada con el bisturí.

Cerebelo separado del resto del encéfalo

 Tronco encefálico dividido. Derecha: mesencéfalo. Izquierda: protuberancia anular y bulbo raquídeo.

Nervios ópticos que parten desde el encéfalo.

Piamadre y aracnoides sujetas a la corteza cerebral

7. ANÁLISIS DE RESULTADOS

Por lo que respecta al cerebro, este presenta circunvoluciones y capilares en la corteza cerebral. Al dividir sus dos hemisferios, se ha podido observar el cuerpo calloso y el tálamo, con un color blanquecino, e intuir el hipotálamo. Además, a pesar de no haber encontrado la glándula hipófisis, sí se ha podido con la pineal. Esta es una pequeña esfera translúcida.

Los nervios ópticos, que se pueden identificar, siguen la típica estructura nerviosa de los nervios, con mielina en el citoplasma de las células de Schwann que les da el aspecto externo blanquecino.

Se puede observar que el cerebelo tiene lóbulos en su superficie y presenta circunvoluciones.

El tronco encefálico parte desde la base del cerebro hasta la médula espinal. El mesencéfalo, de color rosado, presenta cuatro surcos. En cambio, la protuberancia anular y el bulbo raquídeo aparecen con un color blanquecino, ya que su exterior está formado por sustancia blanca. En cuanto a la forma, la protuberancia anular presenta dos surcos en la cara posterior, mientras que el bulbo raquídeo tiene cuatro también en esta cara.

Como detalle, una parte de las meninges no ha sido eliminada. Estas membranas protectoras, que gracias a la investigación posterior se trata de la aracnoides y la piamadre ya que la duramadre queda adherida al cráneo, presentan en su superposición un color oscuro.

8. CONCLUSIONES

Las cortezas cerebral y cerebelar presentan circunvoluciones para un mayor aprovechamiento del espacio.

El cuerpo calloso es una estructura formada por sustancia blanca que comunica ambos hemisferios y transmite información a la corteza cerebral.

La glándula pineal tiene forma esférica y es semitransparente.

El tronco encefálico comunica encéfalo y médula y está formado por mesencéfalo, protuberancia anular y bulbo raquídeo, con características físicas y funcionales diferentes.

Las meninges son capas protectoras del encéfalo que superpuestas tienen un color oscuro.

9. ERRORES DE LA PRÁCTICA

El material utilizado no estaba esterilizado.

La sangre no se limpió completamente.

Al separar el tronco encefálico del cerebro, el mesencéfalo quedó adherido a este y no fue separado junto a la protuberancia anular y el bulbo raquídeo.

Al levantar el cerebro para observar los nervios ópticos, se dañó el hemisferio izquierdo a causa de la presión utilizada.

El corte para separar ambos hemisferios no fue limpio.

No se pudo observar la glándula hipófisis ni el hipotálamo.

Durante la práctica aparecieron sobre el encéfalo y en el interior del mismo pequeños “pelos”, similares a los de una ceja, cuya procedencia se desconoce.

10. CONFIRMACIÓN O RECHAZO DE LA HIPÓTESIS

Se coincide con la hipótesis en cuanto al tamaño, el color (aunque el del cerebelo era de un rosa más pálido). A pesar de la inexperiencia, es cierto que al separar ambos hemisferios sí se pudo identificar el cuerpo calloso y el tálamo, además de la glándula pineal. Contrariamente a lo que se pensaba, las meninges no se habían retirado al completo: quedaba una parte de ellas, de color oscuro, zona al principio no identificada. Cabe destacar que el bulbo raquídeo no se distingue totalmente del tronco encefálico en cuanto a color, pero sí en cuanto a forma, ya que su cara posterior presenta cuatro surcos.